¿No os llama la atención que la mayoría de lo que se escribe por ahí sobre "Euro Nymphing" se escribe desde fuera de Europa?
A mi también.
Sobre todo me llama la atención que entre determinados pescadores ya están dejando de usar el término "Euro Nymphing" para usar en su lugar "Contact Nymphing" o incluso "Tight Nymphing".
Hasta he visto a algunos corrigiendo a los que todavía siguen usando "Euro Nymphing".
A los del " Tight Nymphing" se les perdona porque es otra técnica distinta y me imagino que usar ese término se debe más que nada a desconocimiento, lo que es perfectamente excusable.
En cambio, cuando veo a alguno de los del "Contact Nymphing", solo soy capaz de pensar en algún votante de Trump tratando de robar sus menguantes logros a la vieja Europa.
Otra cosa que me revienta: Coq de Leon.
Coq.
Coq son los de Limousin, buenísimos por cierto.
Leon. Sin tilde.
Los de León son gallos. GALLOS.
Ya te adelanto que seguramente con este artículo no vas a aprender nada de interés.
He escrito algunas cosas intentando transmitir parte de lo que he podido aprender de muchos grandes pescadores y amigos. Yo he tenido la suerte de aprender casi todo de otros. Si hubiese tenido que aprenderlo por mi mismo hubiese sido todo mucho más jodido.
Hoy vengo solo a despotricar un poco.
Y no movido por ninguna motivación patriótica ni nada que se le parezca, ¡que pereza!, sino únicamente por hacer honor a la verdad.
Estoy harto, hasta los mismísimos realmente, de ver en las redes sociales estas dos cosas:
1) Buena parte de pescadores de muchos países del mundo equiparan constantemente lo que Whiting vende como Coq de Leon con las plumas de nuestros pollos de La Cándana, La Vecilla o Aviados. ¡Como si fuera lo mismo!
2) Muchos pescadores de muchos países del mundo no saben donde está el valle del Curueño, ni León ni nada que se le parezca.
La 1 no es del todo culpa nuestra.
La 2, sí.
No hay semana que no lea algo en Facebook que me haga hervir la sangre un poco.
Hace unos días, sin ir más lejos, preguntaba uno en un grupo de montaje de moscas en el que la mayoría de sus miembros son foráneos: ¿cuáles son los mejores materiales naturales para hacer colas de efémeras?
Cuando me topé con esa publicación había unas 35 o 40 respuestas. Ni una sola de ellas mencionaba el gallo de León.
Bronze mallard, moose, pato del bosque, perdiz... ¡Perdiz!
Y así la mayoría de las respuestas, y ni una sola referencia a la pluma del Gallo de León.
Aquí tenemos dos cosas diferentes: las plumas de los gallos de León, pardos e indios, y lo que venden como Coq de Leon, que además ya existe en todos los formatos imaginables: gallo, gallina, saddle, hackle, spey hackle, tailing pack...
Me decía un amigo de fuera de España que no conseguía que sus tricópteros de León le funcionasen como unos que le había enviado yo.
Empezamos a darle vueltas al asunto y resulta que estaba intentando montarlos con plumas de un cuello de esos de Coq de Leon para formar el tejadillo. Las plumas que yo le había enviado de nuestros gallos de aquí ni se atrevía a usarlas, decía que eran mágicas, no había empezado ni uno solo de los mazos que le envié.
Para esto encontramos solución sencilla. Le envié algunos mazos más de una calidad un poco menor y un igualador de pluma. Ahora sí, ahora ya hay tricópteros de León pescando los ríos de color del té y que han sido montados junto a sus orillas.
¿Por qué?
Porque la pluma de los gallos de León y lo que se vende como Coq de Leon son dos materiales diferentes.
Distintos.
¡Ojo! Yo tengo y he tenido bastante material del que venden como Coq de Leon, puesto que he ido comprando por ver cómo era y para algunas cosas es un material muy bueno.
Pero no son plumas de gallos de León.
Simplemente es distinto.
¿Cómo buscar la manera de solucionar esto y que todo el mundo mosquero pesqueril entienda que cuando compran Coq de Leon están comprando y usando algo que ni se aproxima a la calidad y las cualidades de la auténtica pluma de los gallos de León?
Difícil.
Por otro lado también he pedido alguna a vez a algún amigo de fuera de España que me envíe, por curiosidad, uno o dos mazos de plumas de gallo de León, de las de verdad, que llegan hasta Estados Unidos y otros países.
Ciertamente son de una calidad terrible. Colgaderas a 8$ por las que aquí no pagaríamos ni 1€.
Así que al final todo va sumando y se convierte en una tarea titánica tratar de dar a conocer uno de los mejores materiales naturales que existen para el montaje de moscas.
Dicho esto, si se os ocurre alguna idea, será bienvenida.
A mi la mejor opción que se me ha ocurrido, pero que no he llevado a cabo, ha sido enviar de regalo una buena muestra de pluma de gallo de León a Davie McPhail o algún personaje similar y pedirle que monte un tricóptero a la española y que hable un poco de las características de la pluma en comparación con el sucedáneo.
No lo descarto completamente, pero deberíamos hacer una campaña en redes dando a conocer la pluma del gallo de León, la de verdad, sus orígenes, la cría, las variedades...
Lo malo que luego igual sube de precio.
O que igual por el tema este del uranio no pasa las aduanas.
De lo del uranio habrá que hablar algún día, pero ya os digo que tengo pluma de gallos de León criados bien lejos de León que no sé si quedarán por las orillas del Curueño muchos pardos como estos de los que os hablo, criados lejos de las vetas de uranio.
Lo bueno es que si la pluma del Gallo de León, la original, se conociese por el mundo, probablemente serviría para ayudar a la supervivencia de esta maravilla que tenemos.
Mientras tanto no queda otra opción que asistir aterrados al maltrato que sufre la pluma de los gallos de León, principalmente por desconocimiento, o enfrascarse en conversaciones interminables en las redes sociales tratando de arrojar algo de luz, para lo que hay que tener una paciencia que yo ya no sé si tengo.
No, sí lo sé. Yo ya no tengo esa paciencia.
Subid a Facebook e Instagram fotos de moscas atadas con pluma de gallos de León, contad sus bondades, subid fotos de mazos de plumas. Hagamos lo posible para que todo el mundo vea lo que son: un material increíble. Hablemos de Chema, de Quino, de los que ya no están.
¡Qué coño! ¡Seamos modernos!
¡Creemos un hashtag!
#gallodeleonoriginal
¡O el que sea!
Pero algo hay que hacer, porque incluso he llegado a leer opiniones por ahí que decían que para las colas de las ninfas da lo mismo usar el sucedáneo que el original, y que de un saddle dark pardo del sucedáneo sacabas para hacer miles de ninfas.
Claro, esto lógicamente lo dicen porque pagan 8$ por un mazo de basura y comparando eso que les llega con lo del sucedáneo, pues sale ganando la opción más económica.
Cuando luego ven como es una colgadera de las de 1€ de aquí y como son los mazos de riñón de 3€ de aquí, ¡LO FLIPAN!
Así que a ver si hacemos más por esos gallos nuestros, y me incluyo yo el primero, porque en pocos sitios tienen una historia de la pesca a mosca tan arraigada, tan antigua y tan asociada a un material concreto como la que tenemos nosotros aquí.