15 de noviembre de 2024
Si me tuviese que quedar con un solo escenario de pesca entre todos los que he frecuentado, sin ninguna duda me quedaría con la pesca de pequeños ríos costeros cantábricos en pleno verano, cuando más cortos de agua van. En Asturias, de occidente a oriente, que cumplan con estas características nos encontramos con el Suarón, el Porcía, el Meiro, el Anleo, el Negro, el Esqueiro, el España, el Rozaya, el Espasa, el Bedón o el Purón, por decir algunos en los que he pescado. He puesto unos cuantos para abrir el abanico todo lo posible y que todos conozcáis alguno de ellos, pero por si alguien no conoce ninguno, hablamos de ríos con una anchura de su cauce inferior a los diez o doce metros en la mayor parte de su recorrido, cuyo caudal depende fundamentalmente de las lluvias, los de toda la mitad occidental, diría que hasta el Esqueiro más o menos, transitan por zonas de suelos muy ácidos y no destacan precisamente por sus poblaciones de macroinvertebrados acuáticos y salvo alguna excepción puntual, el tamaño medio de sus truchas estaría entre los diez y los treinta centímetros. Y en la mayoría de todos ellos son peces muy asustadizos que no consienten prisas, carreras ni brusquedades. También he pescado ríos de este tipo en Galicia, fundamentalmente en A Mariña lucense, y en Cantabria de manera más esporádica. Pero como mi experiencia en los ríos asturianos centuplica a la que tengo en las otras zonas, hablaré básicamente refiriéndome a esa experiencia en los asturianos. Como decía, lo primero de todo y casi diría que lo más importante es como desplazarse por el río, donde posicionarse y pisar el agua lo mínimo posible. Si nos encontramos ante peces asustadizos, cuando el río va muy corto de agua, todo se amplifica, ya que tienen menos espacio donde sentirse protegidos, les resulta más fácil vernos a nosotros o a la línea, se espantan muchas veces en cuanto posas un 0.12 a menos de un metro de distancia de ellas... Mi regla de oro en estos escenarios es no pisar dentro del agua siempre que sea posible y lanzar desde las piedras de la orilla. Moverme agachado o incluso ponerme de rodillas para que me vean lo menos posible. Tengo un vadeador viejo que hace agua por las ingles que lo uso en estos sitios, porque incluso aunque me meta en el agua cuando no quede otro remedio, raro será que me llegue más arriba de las rodillas. Y para estar arrastrándome paso de joder el vadeador que tengo un poco más nuevo. Lo del wet wading podría ser otra opción, pero a mí no me convence por el tema de las garrapatas. Nunca se me ha enganchado ninguna en toda mi vida y me gustaría que esto siga siendo así. El segundo punto a tener en cuenta en estas condiciones es la longitud del bajo y el grosor del terminal. Cuanto más largo y fino sea todo, mejor. Como decía más arriba he visto truchas salir volando en cuanto el terminal se ha posado cerca de ellas, así que lo mejor es tratar de minimizar este riesgo todo lo posible. En el caso de la línea, si no fuese por lo poco que duran, solo utilizaría aquí las Sunray Jeremy Lucas. Pero es que las que he tenido no me ha durado ninguna ni una temporada entera siquiera. Y no son baratas. Luego me pasé al modelo ese de Snowbee que es también finito. No me acuerdo cómo se llama. Thistledown no sé qué o algo así. Me gustó menos que las Sunray aunque todavía la tengo puesta en un carrete. Y ahora estoy probando las ArcticSilver MD. Si tampoco me convencen me volveré a las Robinson A o AA, por mucho que me fastidie tener que andar engransándolas. Si la opción es usar líneas normales, pues cuando sé que van a pasar casi todo el día encima de las piedras o enganchándose en zarzas y demás vegetación poco amistosa, tiro de alguna WF2 o WF3 de AliExpress. Y si es en algún río sin tanta vegetación o en el que sepa que voy a pescar desde dentro del agua la mayor parte del tiempo, con menos riesgo de rotura o deterioro de la línea, las Scientific Anglers SBT WF2 o WF3. En cuanto a las moscas no tiene gran misterio la cosa, así que utilizo las que habitualmente uso en cualquier otro escenario, y siempre llevo escarabajos y saltamontes, que en un momento dado te pueden arreglar el día y te olvidas de toda la parte de la discreción, los bajos larguísimos y los terminales finísimos. Si bien es un método muy eficaz ese de pescar con terrestres, en lo que se refiere a mis gustos personales, no es lo que más me atrae. Vaya, que lo utilizo porque funciona muy bien, no porque me divierta especialmente. Y para las cañas, si voy a pescar exclusivamente a seca me llevo cañas de entre 7' y 8' para línea 2 o 3. Y si voy a pescar a ninfa con ninfas muy poco lastradas o sin lastrar o en tándem al hilo, no he probado mejor caña para eso que la MX 10'2" línea 0. Es cierto que en muchos tramos de estos ríos es excesivamente larga, así que hace años que le tengo unas ganas enormes a la Hanak de 9'3" línea 0, pero nunca me he acabado de decidir. O había otros gastos o me daba un poco de miedo comprar una caña de una medida tan particular sin haberla probado antes y sin conocer a nadie que la haya tenido para al menos contar con una referencia fiable. Y en cuanto a la pesca en sí, de tener que quedarme con una sola cosa, me quedaría con la delicadeza. O con dos cosas: con la delicadeza y la falta de prisas. Cuanta más calma tengas, mejor. En muchos casos hablamos de peces que únicamente nos van a consentir un lance, así que conviene tratar de hacerlo todo bien a la primera, porque si cometemos un error, el que sea, va a ser muy difícil que nos lo perdonen. Esta no es una pesca para todo el mundo. Eso lo tengo claro. Pero tengo también muy claro que si eres capaz de conseguir que los peces te suban en estos escenarios y bajo estas circunstancias, vas a ser capaz de pescar casi en cualquier lado. Dice un batería muy famoso, Jojo Mayer, uno de los mejores del mundo, que cuando estás ensayando, si lo que quieres es mejorar, lo que estés tocando no debe sonar bien. Si suena bien es que estás tocando algo con lo que estás cómodo, y así no se mejora. En estos ríos y en estas circunstancias nunca se está cómodo, así que la mejora es constante.