Últimamente he ido viendo, lo que el trabajo me ha permitido, varios de los directos de Waderpeople que Mikel lleva a cabo cada día y ha habido dos argumentos que a menudo se han repetido:
1- Está ya todo inventado.
2- La mosca es lo que menos importa a la hora de engañar a un pez.
Con el segundo punto estoy completamente de acuerdo. De hecho, diría casi lo mismo pero dicho de otra manera:
Para que la mosca importe, todo lo anterior tiene que haberse hecho bien.
Ya sabes: lectura del agua, desplazamientos por el río, aproximación al pez, presentación, un bajo de línea correctamente construido, llevar un equipo adecuado a los peces que intentas capturar...
Pero en definitiva, lo comparto. Todo lo anterior importa mucho más que la mosca.
Todos tenéis algún amigo que pesca con moscas que vosotros no usaríais jamás y que al final acaba pescando más o menos lo mismo que vosotros ¿o no?
Aprovecho para recordarte que yo también participé en uno de los directos de Mikel y que
aquí
puedes echar un vistazo si todavía no has tenido tiempo.
Pero... volviendo a lo importante.
¿Está yo todo inventado en el montaje de moscas?Pues seguramente no, ya que siempre puede salir algún nuevo material que permita hacer cosas que todavía no podemos (esos anzuelos de grafeno...).
Pero en esencia, en lo básico, también comparto la opinión de que -casi- todo está inventado.
Obviamente, siempre nos gusta alimentar nuestro ego creyendo que se nos ha ocurrido una idea genial y que nadie más ha tenido la perspicacia de llegar a esa misma conclusión, y a veces las majaderías que se nos ocurren ¡incluso pescan!
Cuando pienses esto haz la prueba: publica en tus redes sociales que eso que se te ha ocurrido lo has inventado tú.
Vas a tener una docena y media de comentarios diciéndote más o menos que llevan usando lo mismo varias temporadas o que un americano lo publicó con anterioridad en no se qué revista en el siglo pasado.
Alguno de esos comentarios será un invento de más mérito que el tuyo, pero otros seguramente estarán en lo cierto.
Recuerdo una conversación hace años con la persona que gestionaba un blog que se dedicaba básicamente a hacer publirreportajes de una marca finlandesa de material de pesca con mosca, y que absolutamente enfervorecido defendía a capa y espada que el señalizador en las moscas secas lo había inventado uno de León.
Por supuesto no entré en la discusión y feliz que le dejé allá en su ignorancia. Detectar con quien no merece la pena perder un segundo de tu tiempo no es un invento, pero sí un aprendizaje muy valioso.
El caso es que aquello no era cierto, y a lo largo de las próximas líneas lo podrás ir viendo.
Primero habría que preguntarle a Marc Petitjean si el penacho blanco de la MP81 y la MP82 lo puso únicamente con intención de ver mejor la mosca, porque si eso es así, ya había al menos uno que ponía indicador en las moscas secas antes incluso de que existiesen los floss de colores fosforitos.
O más claro todavía, la Hi-Vis Griffith Gnat lleva indicador desde hace ni se sabe la de años...
Pero no quería yo hablar de estos dos casos, sino de otros.
Con el tema del confinamiento creo que estoy aprovechando más que nunca para releer mi abundante biblioteca de pesca y montaje de moscas, y revisando uno de estos libros que llevan en casa desde principios de siglo, he ido viendo una serie de montajes y modelos que le dan una enorme patada a nuestro ego de diseñadores de moscas avanzados.
El libro al que me estoy refiriendo es el siguiente:
Ragonneau, N.; Ducloux, D.; Mouches de pêche, l'encyclopédie, Artemis Eds., 2004. ISBN 2816009939.
De la cita bibliográfica lo más importante en este caso es el año. Fíjate bien, 2004. Esa es la fecha de publicación. El depósito Legal es del año 2001, por lo tanto, y esto es más importante todavía, todas las moscas a las que se hace referencia en ese libro deberían ser anteriores a 2001 (tampoco sé exactamente como va lo del depósito legal en Francia, pero bueno, ya te haces una idea de por donde voy).
Y ya que hemos mencionado las moscas secas con indicador, vamos a empezar por aquí mismo.
En dicho libro aparece una tricóptero de CDC con indicador que podría ser lo mismo que muchos pescadores están aprovechando para atar durante estos días de confinamiento.